Fui a ver el espectáculo de Pierre Rigal en los teatros del canal, de la compañía Dernière minute.
Impresionante lo que puede llegar a hacer con el cuerpo, la expresividad de la música, la angustia y la estética unidos. Un desconcertante solo de un bailarín metido en una caja.
En este vídeo no se aprecia la esencia del directo, pero te haces una idea de la originalidad y creativa propuesta.